Asociaciones de vecinos: ¿por qué organizar una?

Siempre que hay quejas en un entorno urbano, muchas personas piensan que el ayuntamiento es la primera instancia a la que acudir. Cuando los problemas exceden un edificio, se producen en casas o tienen que ver con comercios, entonces las comunidades de vecinos no son suficientes.

Ahí es cuando surgen las asociaciones de vecinos, que son instituciones de organización propia que tienen ámbitos de acción más amplios que los de un edificio y que velan por los intereses de una comunidad.

Hay quienes rechazan la idea de crear cualquier asociación por temor a la burocracia. Otros piensan que no es necesario organizar una asociación de vecinos, la cual podría ser una réplica del mal funcionamiento de una comunidad de vecinos. Entonces, ¿por qué es conveniente organizar una?

Unificar estrategias

No hay que esperar a que los problemas desborden las situaciones para poder enfrentarlos. Sin embargo, en un barrio o urbanización es necesario unificar estrategias para combatir esos problemas.

Coordinar a los diferentes líderes y voceros de la comunidad puede ser complicado, y las asociaciones de vecinos son una de las mejores instancias donde se pueden debatir y enfrentar estas problemáticas.

Además, esto generará consensos sobre las estrategias más adecuadas para poder abordar los problemas de los vecinos ante las instancias competentes.

Representación plural

La vocería de los vecinos no puede ser una imposición y las asociaciones de vecinos son, en esencia, democráticas. Los vecinos interesados en participar podrán elegir, a través del voto, quiénes serán los representantes de la asociación de vecinos en las diferentes tareas que tendrán. Además, al ser una instancia pequeña, se facilita mucho más la democracia directa, por lo que muchas decisiones podrán ser tomadas por mayoría en asamblea.

El hecho de que se elija votando a varios cargos de la asociación de vecinos permite que esta esté conformada por miembros de distintos orígenes, con diferentes sensibilidades, y que estén enfocados a diferentes áreas. Todo esto le proporcionará a la asociación mayor fuerza, al tener personas representando muchos intereses y con más dedicación.

Más voz

La organización y la pluralidad de las asociaciones de vecinos les dan más voz ante los problemas que puedan surgir, especialmente en dinámicas urbanas. No es lo mismo un grupo espontáneo de vecinos protestando, que una asociación de vecinos encabezando una protesta con exigencias específicas y un plan de acción.

Las asociaciones de vecinos pueden, además, recibir subvenciones públicas, lo cual hace que tengan más voz y puedan estar representadas cuando los gobiernos de diferentes niveles tomen decisiones que afecten a la comunidad.